Uno de los problemas que está generando el cierre parcial de la Línea 6 de Metro de Madrid por las obras de mejora son las largas colas en la estación de Méndez Álvaro en hora punta, así como numerosas personas despistadas que desconocen el autobús que tienen que coger.
Las horas críticas coinciden con la entrada a los trabajos, la pausa para comer o la vuelta a casa por la tarde y que alargan los viajes a los usuarios acostumbrados a la rapidez del metro, a pesar del refuerzo de la EMT con 60 autobuses más para acoger a todas esas personas extra que utilizaban el suburbano.